lunes, 15 de octubre de 2007

Deporte y Adopción ¿Pero que tiene que ver el deporte?

¿Que tendría que ver el deporte con la adopción?. Eso fue mi pregunta al hojear la sección sobre "Aprendizaje" en el libre "Adoption Parenting".




La verdad es que a primera vista me pareció una exageración porque no pude imaginar que ser adoptado podría tener importancia en el mundo deportvio - pero el artículo fue una sorpresa muy bonita.

(para más información sobre la foto, hacer clic aquí.)



Padre adoptivo, Ron Margolin, nos cuenta que su hija Olivia, adoptada de China, empezó a andar antes de tener 10 meses y que pudo lanzar un fútbol y jugar al beisbol con sólo dos años. Dice que demostró un control sobre su cuerpo que fue alucinante...





En cambio su hermanita, Lili, que llegó con 21 meses fue diagnosticada "niña con necesidades especiales". El "raquetismo" le había causado deformaciones en los huesos; tenía las piernas mal formadas y el pecho también; con 21 meses estaba empezando a andar, pero casi no podía porque estaba tan débil.





Una vez en casa Lili empezó a recuperarse rápidamente, pero seguía con retrasos importantes en su desarrollo. La esperanza de sus padres fue que algún día podría progresar lo suficiente como para poder jugar bien con niños de su edad...





Cuando Olivia tenía 7 años una amiga le convenció para ir a una clase de gimnasia con ella - y la pequeña Lili quería ir también - por supuesto. Sólo tenía cuatro añitos, pero los padres decidieron traerla y la metieron en la clase de principiantes.





Pronto, la profesora dijo que Lili debe de ir a la clase de Olivia - porque la clase de principiantes era demasiado "infantil" para ella.





Parece que a las dos les gustaron bastante la clase de gimnasia porque durante el verano fueron a un campamento de gimnasia todos los día durante dos semanas... el problema ocurrió cuando que al ir a recoger a sus hijas un día, los padres no podían encontrar a la pequeña Lili. Cuando al final apreció, dijo que habia estado haciendo "algunas cosas" con los profesores - y ya está.





El día siguiente la vieron rodeada de profesores y entrenadores - y por fin, vino la profesora de Lili para decirles que la entrenadora jefa quería hablar con ellos.





La entrenadora, una mujer China de unos 40 años, les informó que le parecía que la niña tenía talento para ser una gran gimnasta y quería empezar a prepararla para competir. "Tiene todo - coordinación, velocidad, flexibilidad, equilibrio, falta de miedo. Además le encanta. Lo que falta es fortaleza. Es muy débil, pero podemos darle eso. Podemos hacerla fuerte."





A pesar de que a los padres 2 horas 2 veces por semana les pareció mucho compromiso para una niña de sólo 4 años - decidieron darle la oportunidad de intentarlo. A la hora de escribir esta historia para "Adoption Parenting" la niña tenía 10 años, estaba entrenando 16 horas por semana e iba muy bien - era una gran gimnasta.





Dice Ron, que han aprendido muchísimo sobre las atletas competitivas (que son muy perfeccionistas y exigentes con si mismos), mucho sobre los deportes mismos y mucho sobre sus dos hijas (Olivia, la mayor también ha hecho bien, aúnque no tuvo el talento de su hermana). En cuanto a la relación entre el deporte y la adopción, dice:





"Quizás el beneficio mas grande de ser un atleta competitiva de alto nivel es la contribución que el deporte da al desarrollo de la identidad del niño, la imagen que tiene de su cuerpo y la fé que tiene en si mismo. Esto es verdad sobre todo para un niño adoptado, que se enfrenta con obstáculos especiales a la hora de desarrollar una identidad fuerte y positiva. Cualquier problema que tiene con su identidad cultural o racial, con comprender su lugar en su familia o su papel en la sociedad, un niño que tiene el deporte siempre puede confiar en si mismo por su fortaleza física, las habilidades especiales que posee, y el respeto de sus compañeros de equipo. Una de las cosas que siempre nos ha impresionado es la amistad y respeto que los miembros mayores del equipo demuestran a los que son más pequeños."





También dice:





"Los psicólogos nos dicen que si el autoestima sube en una parte de la vida de nuestros niños, tiende a llegar a hacerlo también en otras áreas. Gimnastas competitivas y otros atletas de alto nivel tienden a sacar buenos resultados en el colegio. Esto se debe en parte a su autoestima que viene de sus capacidades físicas, pero también porque tienen auto-disciplina, saben seguir instrucciones con precisión, tienen capacidad de prestar atención y tienen voluntad para trabajar duro. Como su horario es muy exigente necesitan organizarse bien. Los deberes se tiene que hacer en cuanto salgan del colegio. Los trabajos no se puede dejar para el último minuto. Pero lo más importante es que los niños que practiquen deportes competitivos no tienen tiempo - y se respetan demasiado - para meterse en líos."





Este padre nos da cuatro recomendaciones para los padres con hijos que quieren practicar deportes competitivos:





-Ante todo, debe de ser siempre divertido


-Hay que elegir el centro con cuidado (con un ambiento positivo)


-Los entrenadores nunca jamás deben hablar de peso.


-Es crucial que los padres y los hijos tengan expectativas realistas (es decir, no se debe de obsesionarse con las medallas olímpicas)





Bueno, es la perspectiva de un padre.





Me parece fenomenal desde el punto de vista de recordarnos que el simple hecho de que un niño llegue con retrasos en el desarrollo, problemas derivados de la malnutrición, o cualquier cosa, no debemos nunca limitar a esa personita.





Los horizontes los dibujamos nosotros, pero si avanzamos hacía ellos, es increíble ver como retroceden.








3 comentarios:

José Luis dijo...

Estoy de acuerdo con lo que dices. El deporte, aparte de la componente de salud, refuerza la autoestima, ayuda a la superación personal y sobre todo, ayuda a encajar los fracasos y a colocarnos en nuestro sitio ante los demás y aprender que no siempre se gana... darse cuenta que a veces lo mejor es participar y ganarse a sí mismo es muy reconfortante y cuando se gana...¡se toca el cielo!
Saludos

Brenda Padilla Ericksen dijo...

Gracias Jose Luis,

Si - como no soy muy deportista, no me había dado cuenta de todo lo que podría ofrecer. Más que nada me encante el hecho de que una niña que vino tan malnutrido podría hacer tanto - el ser humano es realmente increíble. No hay límites.

Brenda Padilla Ericksen dijo...

Gracias Jose Luis,

Si - como no soy muy deportista, no me había dado cuenta de todo lo que podría ofrecer. Más que nada me encante el hecho de que una niña que vino tan malnutrido podría hacer tanto - el ser humano es realmente increíble. No hay límites.