martes, 18 de noviembre de 2008

Mamá, Papá ¿Y los que no fueron adoptados?


(Foto: "Al mundo, puede que seas una sola persona... pero a una sola persona puede que seas el mundo." -anónimo)

El viernes 14 de Noviembre 2008 hice una entrevista a Amy Eldridge, una de los fundadores de Love without Boundaries (como "Amor sin Límites") un ONG que trabaja de forma incansable en China para proporcionar atención médica, nutrición, educación y mucho más a niños necesitados. En su mayoría son residentes de los más de 100 orfanatos que reciben ayuda de esta organización. Amy es madre de siete hijos - dos de ellos (una niña y un niño) de China, y me dijo algo que no puedo olvidar. Fue algo así: Llega el momento en que tus hijos te preguntan - "¿y que pasa con los demás - los que no fueron adoptados?"

Love without Boundaries es una respuesta a esa pregunta tan difícil.


Lo que pasa en realidad en un país como China - según Amy - es que la gran mayoría de los niños que llegan a un orfanato tienen problemas de salud, algunos bastante graves otros no tanto. Ella ha conocido a familias que confiesan haber dejado a sus hijos en un orfanato simplemente porque pensaban que allí tendrían más posibilidades de conseguir la ayuda necesaria. Pero la triste realidad es que no es así.


Aúnque este ONG se formó en 2003, de alguna manera, Love without Boundaries comenzó en 2001 cuando Amy recibió en China a su primer hijo - una niña - de ese país. Era tan delgadita que la madre quiso ver el orfanato para saber como podría colaborar para mejorar la situación de los niños. Dice que el director le enseño un niño con la piel azul, se estaba muriendo por culpa de un corazón que no le hacía llegar el oxígeno suficiente. Amy preguntó por la fecha de su cirugía y el director le mostró una cara de tristeza. Era imposible. El niño iba a morir.

Hoy, ese niño es un milagro. Un grupo de personas se movilizaron para recaudar los fondos necesarios para hacer la operación (sólo unos 6,000 euros en China), cuidar de él durante su recuperación y ayudarle a llegar a su familia. Hoy está sano y vive con su familia adoptiva - y como él hay muchísimos más, más que nada niños que nacieron con problemas de corazón o problemas de fisura del paladar que están bien y que están con sus familias gracias a los esfuerzos de Love without Boundaries. Algunos de esos niños hoy viven en España.

Ahora más que 100 personas de muchos países, incluso China, que trabajan con Love without Boundaries de forma totalmente voluntario. Hay cirujanos que viajan a China para colaborar con el programa médica. Hay fisioterapeutas que proporcionan formación al personal de los orfanatos. Hay gente organizando la compra y el entrego de leche en polvo de alta calidad (de Nestlé China). Hay personas organizando eventos y actividades - incluso la publicación de un libro precioso - para recaudar fondos para financiar operaciones en hospitales Chinos, programas de acogida familiar, becas para estudiar y la compra de ropa, zapatas y todo lo demás.


Love without Boundaries Llega a España

Desde hace varios años recibo el boletín de esta organización que ya se está registrando en España gracias a la colaboración de un grupo de maravillosas mujeres. Ya se puede recibir el boletín en Español y lo recomiendo a todos. No solo ofrece oportunidades para colaborar, sino que proporciona perspectivas sobre China que difícilemente se podría conseguir de otra forma. Por ejemplo en el Boletín de Septiembre 2008 se puede leer un reportaje sobre "Un Día en la Vida de una Familia de Acogida de Love without Boundaries" - precioso.

A mí, personalmente, me ha emocionado el poder conocer a través de los relatos de representantes de Love without Boundaries a las personas Chinas que trabajan tanto para conseguir mejoras en sus orfanatos, que se preocupan tanto por los niños que tienen a su cargo. Sé que han llegado a las noticias internacionales historias que estremecen - pero hay que conocer el otro lado de la realidad - porque como en todo el mundo, hay personas de todo tipo.

Otra cosa es la posibilidad de ver las caras de los niños que están aprovechando de cada oportunidad que se les proporciona. Me encanta ver lo guapos (y guapas) que se quedan después de operarse, como disfrutan de sus familias de acogida mientras esperan reunirse con sus familias permanentes y como algunos están destacando en sus estudios y llegando a secundaria e incluso la universidad (hay un programa de becas para niñas de familias pobres).

Me quedé helada cuando leí hace poco como una madre China, al oir hablar de la llegada de trabajadores de Love without Boundaries viajó a la zona con su niño en brazos para pedir ayuda médica. Cuando le dijeron que el pequeño todavía era demasiado pequeñito para operarse, se deshizo, rogando su ayuda porque sabía que sus familiares estaban en contra de quedarse con una niño con problemas de salud. "Amo a mi bebé," dijo llorando. De ese encuentro y otros muchos con campesinos que llegaban pidiendo ayuda, ha nacido el "Unity Fund" para ayudar a tantas familias que buscan la forma de mantenerse junto con sus hijos.

Sé que hay más grupos como Love without Boundaries trabajando en todo el mundo - algunos ya tienen su enlace aquí en el blog. Sería estupendo si los que tienen experiencia con otras organizaciones podrían dejar alguna información aquí en los comentarios.

Mientras tanto, si alguién quiere recibir en español el boletín de Love without Boundaries, envía un correo a blpadilla@hotmail.com y le pondré en contacto con los organizadores.

Las imágenes son de la página web de Love without Boundaries.

sábado, 1 de noviembre de 2008

En Busca de la Madre Biológica

Foto: "Las Madres Biológicas Nunca Olvidan"

"Echo de menos a 'China-Mamá'," dijo mi hija nada más sentarnos a cenar hace un par de días.


El hecho de que no tenga recuerdos de la mujer que le dio la vida no es importante. También pienso en ella - no tanto como al principio. Pero sí, la tengo en mi corazón.


He leído bastante sobre las madres biológicas. Hoy en día - sobre todo gracias a internet - podemos conocer mejor la experiencia de las mujeres que dan vida a nuestros hijos. Y pienso que cuanto más información tengo, mejor puedo apoyar a mi hija en su búsqueda.


Recordamos que según nuestro gran experto en adopciones, el Doctor David Brodzinsky, el 100% de nuestros hijos buscan a sus padres biológicos. Empieza con las primeras preguntas - sobre los tres añitos, incluso. No tiene porque terminar en un encuentro con los padres originales; es simplemente una faceta más de la vida de una persona que se ha unido con su familia a través de una adopción.


Comprendo a las personas que prefieren pensar que la madre biológica seguramente ha superado la separación de su crío - sobre todo si ha sido voluntario - pero tanto mi experiencia como por lo que he leído muestra lo contrario. Por supuesto habrá alguna excepción, pero creo que en la gran mayoría de los casos, dar a un hijo en adopción es algo que marca a una mujer para siempre.


Ya he compartido la historia de mi tía (ver Historia de Amor II) que tuvo que dar en adopción a su hija y nunca se recuperó de aquello. Pero también he leído muchísimos casos en Internet. Puede que no sean representativos de todas las madres biológicas, sin embargo la gran similitud de sus experiencias, el dolor que sufren y la imposibilidad para olvidar, me dice que podría haber un especie de "síndrome" que posiblemente afecte a la mayoría de esas madres.


Acabo de leer la historia de Lucy, una mujer que dió a su hija en adopción por voluntad propia y quien siempre ha creido y sigue creyendo que hizo lo mejor para la niña, y es increíble como aún así ha sufrido tanto. Se han reunido y podéis ver las fotos de madre e hija al final de su página.


Lucy anima a todas las madres biológicas a buscar sin rendirse nunca - por el bien de ellas y de sus hijos. Es algo que he leído muchísimas veces. ¿Pero qué quieren esas mujeres? ¿Recuperar a sus hijos? No. Generalmente lo que quieren es asegurarse de que todo ha salido bien, hacer las paces con la decisión que tuvieron que tomar, dar explicaciones al hijo. Muchas veces quieren dar las gracias a los padres adoptivos.


En el Centro para mujeres embarazadas de Ae Ran Won de Corea del Sur, piden a las madres que escriban una carta a los hijos que van a dar en adopción. Forma parte de una terapia para ayudar a las mujeres a superar el trauma de dejar a sus hijos en los brazos de otra mamá. Algunas de las cartas se han publicado en el libro "Deseo para tí una bella vida" y creo que debe de ser lectura obligatoria para todos los padres y madres adoptivos.


"Algunas veces no podemos hacer o actuar como queremos," dice una madre. "Si hubiera sabido lo rápido que te llevarían, habría estado más preparada para abrazarte después de tu nacimiento. Ahora que te has ido, me pregunto como seré capaz de vivir el resto de mi vida.


"Pero quiero que sepas una cosa - que incluso si te cría otra persona siempre serás mi bebé y siempre te añoraré. Rezaré por tí sin cesar y deseo que sólo te pasen cosas buenas. Incluso si no podemos vivir como madre y su cariñoso bebé, todavía te amaré muchísimo..."


Otra madre aprovecha para escribir una nota a los padres adoptivos: "No sé cómo puedo expresar de forma adecuada mis gracias por criar al niño que he parido. Supongo que sólo puedo decir gracias. Creo que seréis buenos padres." Explica que le gustaría conocer algún día a su hijo pero si eso supone problemas para alguien entonces no lo intentará.


"Que asustada, preocupada y triste estaba yo durante el proceso de darte en adopción," dice otra. "Cariño mío, ¿me puedes perdonar? Te escribo esta carta porque quiero que sepas lo que ocurrió en tu vida. Tu madre está triste con una herida profunda en su corazón.


"Cada vez que veo bebés, me recuerdan a tí, y lloro. Te imagino en mi corazón y pienso que estás en algún otro lugar desde que te dí a luz. Nuestro primer y último encuentro era tan corto, justo después de tu nacimiento - está todavía muy vivo en mi corazón y me hace llorar. Creí que dejarte ir era la mejor decisión para tí. Sin embargo, no pude olvidar tu cara y después de verte, incluso tuve remordimientos por haberme quedado embarazada.


"Ahora tengo sólo un deseo, y es para que estés feliz con tus padres adoptivos... quiero que seas una persona feliz con una sonrisa grande... ¡Mi querido bebé! Aúnque estés tan lejos de mí, siempre estarás en la parte más profunda de mi corazón. Tu presencia en este mundo me hace más feliz."


He oído hablar de que la experiencia de las madres biológicas tiene que ser diferente dependiendo de la cultura de su país y de su situación económica - es decir que las madres de paises desarrolladas o que viven en la pobreza experimentan esta separación de otra forma, más que nada porque la supervivencia es su prioridad y así pués "no tienen tiempo para deprimirse" por ejemplo.


No lo creo. He leído historias preciosas de madres biológicas de países latinoamericanos en vías de desarrollo, madres de los escalones más sufridos de esos países, que han tenido la oportunidad de mantener el contacto con las familias adoptivas de sus hijos. Todo indica que su experiencia es igual que la de una mujer con más recursos que decide dar a su hijo en adopción porque simplemente "no es el mejor momento" para criar a un niño.


La Doctora Kay Johnson (Querer una Hija, Necesitar un Hijo) ha investigado bastante la situación en China. Junto con investigadores Chinos, ha intentado retratar el abandono, la adopción y los cuidados en los orfanatos de China. A pesar de las dificultades para localizar a familias que han "abandonado" a sus hijos, pudieron hacer encuestas a 247 familias. En algunos casos pudieron entrevistarse con las madres. Dice Johnson, "Aunque la mayoría de los padres biológicos se escapan de las consequencias legales del abandono, algunos sin embargo sufren las consequencias emocionales. Algunas madres biológicas dijeron que sintieron la pérdida durante muchos años, aunque la mayoría dijeron haberlo superado con el tiempo. En una larga entrevista, una madre biológica dijo al principio - en un tono muy sensato - que después de 10 años, 'el tiempo había curado' sus heridas. Pero a pesar de sus palabras, la entrevista acabó cuando no pudo contener las lágrimas y tuvo que salir, diciendo que nunca queriá volver a pensar otra vez en esta tema. En otra entrevista, una madre biológica empezó a llorar antes incluso de que empezaran a hablar con ella; varios años después de abandonar a su segunda hija, sigue sin estar segura de que algún día podría volver a quedarse embarazada a pesar de tener un certificado de permiso para tener otro hijo y de estar bajo mucha presión por su marido y sus suegros. Juró que si alguna vez volvía a quedarse embarazada, no volvería a abandonar nunca jamás a sus hijos sin importar el género..."


Supongo que la información que tengo aquí representa mi búsqueda por la madre - y la familia - biológica de mi hija. Siento la necesidad de saber todo lo posible sobre ellos, para comprender porqué ella está aquí con nosotros, y así poder saber responder a sus comentarios y preguntas.


Cuando mi hija dijo que echaba de menos a su "China-mamá", le respondí, "Por supuesto. Yo también."


Ahora, con cinco años, su búsqueda está ampliando. Tiene mil preguntas. No siempre las sé responder, pero vamos tirando. Tengo la esperanza de que algún día los libros y las páginas web más otros recursos que ní podemos imaginar sean de gran ayuda para ella. Mientras tanto, de vez en cuando volveré yo a echar un vistazo - es decir, hacer un poco de búsqueda propia.


Y vosotros ¿Que tal la búsqueda?