sábado, 4 de junio de 2011

La Hija No Olvidada

Imágen: Dr Changfu Chang, documentalista y profesor de periodismo en Estados Unidos.


Gracias a una madre fantástica que participa mucho en este blog a través de los comentarios, he podido conocer el trabajo del Dr Changfu Chang, periodista en China y ahora profesor de periodismo en la Universidad de Millersville, Pennsylvania, EE.UU. Es nativo de la provincia de Jianxi en el sureste de China.

El Dr Changfu ha creado una serie de documentales sobre China y Adopción. Que yo sepa, estos documentales solamente existen en inglés por el momento. Así que - siendo fiel a la misión principal de este blog - los iré comentando aquí para así crear una vez más un puente entre la información sobre adopción en inglés y las familias adoptivas de habla hispánica.

El primer documental que he visto se llama "La Hija No Olvidada" (My Unforgotten Daughter).


Es la historia real de Jadra, una niña china que esperaba a su familia en un orfanato chino, y su madre Meredith, quién fue dos veces por ella...

La historia de Jadra presenta un dilema importante para cualquier familia adoptiva: ¿Qué hacer si nos entregan a un niño que parece padecer graves problemas de salud? ¿Tenemos la obligación de adoptar a ese niño? ¿Es mejor adoptarle aunque quizás esté destinado a morir en poco tiempo - o es mejor dejarle en su país de origen, donde está, rodeado de lo que conoce? ¿Es este niño de la foto, nuestro hijo desde el momento en que esté asignado a nuestra familia - o no?

Así fue el gran dilema de Meredith, quién se encontró con una niña cubierta por lunares, cientos y cientos de lunares. Dos pediatras estaban en su grupo de familias y se ofrecieron para examinar a la niña. También Meredith pidió más reconocimientos médicos y mandó información a un hospital prestigioso de EE.UU. para conseguir los diagnósticos de los dermatólogos allí. Al final, se quedó con la posibilidad de que la niña tenía una especie de melanoma agresiva y que podría morir en poco tiempo.

Fue un palo para Meredith, pero también para el grupo de familias. Ellos también cuentan su historia - y creo que es útil considerar antes de ir en uno de estos viajes, la posibilidad de que alguna familia se encuentra con dudas, dificultades o preguntas importantes que inquietan al grupo. Porque ellos no sabían reaccionar. Se sentían algo culpables por estar tan felices mientras que Meredith pasaba de consulta en consulta intentando saber qué hacer.

Mientras veía el documental me encontré con sentimientos encontrados: por un lado me parecía claro que Jadra ya era la hija de Meredith, que la tenía que cuidar, aceptar, llevar a casa y buscar los mejores cuidados médicos. Por otro lado, pude comprender la agonía de Meredith, que ya tenía 2 niñas más en casa, 2 hijastros mayores más y un matrimonio que quizás ya estaba en crisis (porque se conoce que después de la adopción se rompió - pero no se sabe cuál fue la situación mientras que Meredith estaba en China acompañada por una amiga).

¿Qué hacer? ¿Qué haría yo?

El gran dilema creo yo es que incluso considerar estas preguntas hace cuestionar todo lo que creemos sobre la adopción - que es una forma más de crear una familia, que tenemos el mismo compromiso con los hijos que nos asignan que tenemos con cualquier hijo.

En algún momento quería gritar: ¡Esto no es el Corte Inglés! ¡No se puede devolver a la niña! ¡No es un producto defectuoso es una persona!

Pero en el próximo instante, mi corazón dolía por Meredith, un ser humano que quería hacer bien, que no parecía mala persona, que quería a la niña, que tenía miedo, mucho miedo, que pensaba en los demás hijos suyos, en como aguantarían ver como su nueva hermanita moría lentamente, sufriendo, agonizando quizás.

Me acuerdo como Mia Farrow - la famosa actriz - tuvo que enfrentarse al mismo dilema. Cuando llegó a recoger a uno de sus hijos en no me acuerdo qué país, se encontró con un niño con problemas de salud tan graves que no se sentía capaz de enfrentarse a ellos. Pero ella, con su fama y sus contactos, pudo encontrar a una familia en EE.UU. que sí se sentía capaz de cuidar de ese niño. Me acuerdo que le baño, le quitó los piojos, le preparó cuidadosamente para que fuera a conocer a su nueva familia en condiciones. Pero es que Meredith no era Mia y no tenía estos recursos.

¿Qué hacer?

Meredith decidió dejar a Jadra en el orfanato. Volvió a casa con la pequeña Emma. Llevó con ella un sentimiento de culpabilidad también.

Milagrosamente, una familia de su grupo volvió unos pocos años después a la misma zona de China y - a petición de Meredith - fueron al orfanato para saber que había sido de Jadra. Allí estaba, más mayor, muy sana y muy bien.

Meredith, a pesar de haberse separado de su marido, y de ser madre soltera de familia numerosa, decidió volver por Jadra. Buscó a una persona muy hábil (un especialista en adopción de China que vivía y trabajaba en EE.UU.) para ayudarle a volver por la niña, que teóricamente tenía que haber sido imposible por dos motivos, primero porque la había rechazado y segundo porque China no permite que los padres eligen a los niños para así reducir posibles casos de corrupción. El experto chino debió de haber sido muy hábil, con muy buenas conexiones en China, porque consiguió convencer al Centro de Adopción China para que Meredith no sólo volviera por la niña, sino que lo hiciera en un tiempo récord.

Y, milagrosamente, el ex-marido de Meredith también aceptó ser el padre de Jadra a pesar de todo... como él dijo, ¿Cómo podría ser padre de las demás niñas y no de Jadra?


Así que esta historia ha salido bien al final de todo. Pero yo, sigo con mis inquietudes. Los dilemas como estos son importantes. Creo que es bueno vivirlas a través de un documental como esta. Es sano preguntarnos qué habríamos hecho si estuviéramos en el lugar de Meredith o en el lugar de una de las personas de su grupo. Y sobre todo - tenemos que preguntarnos qué significa un caso como esto para la adopción en general.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Brenda

a mi lo que más me sorprendió fue, precisamente la respuesta del EXmarido cuando dijo "sí, seré el padre".

Y no, no me gustó nada la reacción de esa madre, no porque no se la quedase cuando pensaba que iba a llevar a alguien a morir a un lugar lejano en el que no iba a tener más que el stress de la adaptación etc... sino porque siguió considerandola su hija y la volvió a buscar cuando supo que estaba sana.

Comprendo que en su situación no pudiese enfrentarse a ello, pero no comprendo como tiempo después, cuando vió que la ninya estaba sana..., entonces sí...y además no hubo un seguimiento ni le enviaba cosas ni tenía contacto frecuente. Aunque efectivamente no la olvidó, pero no se preocupó de ella cuando estaba supuestamente muriendo y sí se la llevó cuando supo que estaba bien. Es demasiado arbitrario para tratarse de una adopción.

Pero realmente es una situación muy límite y complicada.

Saludos
Eva DE

Mari Carmen dijo...

Encontré este fragmento
Dos fragmentos de Amor Sin Límites y mi hija inolvidable, documentales acerca de la adopción china. lovewithoutboundaries.org

http://www.youtube.com/watch?v=UZeKU231fGQ

Elén dijo...

Hola,
Mi inglés no es muy bueno, pero me gustaría ver esos documentales, ¿sabes donde podría conseguirlos?¿se pueden ver on-line?
muchas gracias
y por otro lado, si no te importa, me gustaría añadir estos documentales en mi blog de La Adopteca, porque aunque estén en inglés, son interesantes.
Que lástima que nadie esté interesado en traducirlos...
UN saludo
Elén

Anónimo dijo...

Elén

a mi el Sr. Changfu Chang me dijo cuando los compré que si recibía suficientes pedidos, les pondría subtítulos para las familias espanolas y las holandesas. Que a los que los habíamos comprado nos los enviaría si queríamos con los subtítulos en caso de que se hiciesen.


Y, por cierto, un placer! he comprado muchos libros y visto pelis de las que aparecen en tu blog.

Saludos,
Eva DE

Roberto Pili dijo...

Conozco un caso de una familia española que vivió una historia muy parecida y que al cabo de unos años volvió a buscar la peque que había dejado en China...
Es muy difícil juzgar... por mi trabajo he conocido muy de cerca, más de un caso de renuncia. De hecho el más reciente hace menos de dos semanas.

M. dijo...

He conocido varios casos de familias que han rechazado al niñ@ por varios motivos, la mayoría médicos, y se que lo pasan realmente mal, que el sentimiento de culpabilidad es muy grande...........pero a pesar de ello sigo sin entender que dejes allí a tu hija o hijo...........¿porqué? les pregunto, responden que por mis otros hijos, por que no puedo hacerme cargo........pero entonces ¿porqué has querido tener un hijo? ¿pòrqué arriesgarse? si lo decides tienes que asumir todas las consecuencias..........en fin, tampoco entiendo a Meredith que vuelve a por la que cree su hija cuando sabe que está sana............intento entender las circunstancias pero no lo consigo.

Un besito

Marian

Anónimo dijo...

intentaré contestar a tu pregunta, M. ¿porqué algunas mujeres se hacen la prueba de la amniocentesis? porque probablemente no pueden, quieren o saben afrontar determinadas enfermedades, y no por ello no quería un hijo.
En la adopción el riesgo es mayor, no controlas el embarazo, ni la alimentación, ni el alcohol...y si hay enfermedades evidentes, graves e incluso con una probabilidad de vida muy corta...¿tan difícil es empatizar con una madre que sabe que no podrá hacerse cargo, sea biológico o adoptivo? Probablemente los que no empaticen es porque no lo han vivido. Yo sí. Un hermano muerto por hidrocefalia antes de los 2 años. En la adopción, la asignación, hidrocefalia. Sé como lo vivió mi madre, y sé que yo no soportaria ver morir a mi hijo.

Mei dijo...

Yo quiero subrayar al espíritu luchador de una familia que no dudo en traerse a su hijo gravemente enfermo...y la vida se lo ha llevado, finalmente, pero con la magia en su corazón de haber conocido los abrazos, besos y caricias de su familia
http://www.arturoyrosa.blogspot.com/

Brenda Padilla Ericksen dijo...

Hola Todos,

Como siempre: miles de gracias por la participación en el blog. Así lo enriquecimos.

Primero Elén - puedes adquerir los DVD en http://www.lovewithoutboundaries.org/bio/index.html - si necesitas ayuda para comprender alguna cosa, dímelo (blpadilla@hotmail.com)

¡Tenemos que conseguir que los doblen! ¿Podríamos empezar a organizarnos?

Referente a este debate. Voy a confesar una cosa: al ver esta historia (la de Meredith), en algunos momentos me sentí verguenza por la mentalidad del típico americano super-consumidor. No culpo a Meredith sino a nuestra cultura de EE.UU. que enseña a ver todo en términos del consumo. Mientras que la niña fuera un producto defectuoso - no había otra elección que devolverla.

Bueno es un analisis frio - una de las perspectivas que pasó por mi mente. Pero luego, comprendo a los padres que no eligen adoptar el niño. ¿Qué pasa? Una vez más la adopción es diferente a la vía biológica. Si sabía a ciencia cierta que te iba a nacer un niño con graves problemas, casi seguro que no te meterías en eso.

Personalmente, no sé. También tuve que pensar en otros hijos cuando fuí por mi hija. Tenía claro que ya era mi hija, no planteaba en ningún momento la posibilidad de "devolverla" o "cambiarla". ¿Pero qué hubiera hecho si había tenido una grave enfermedad...?

Me ha encantado el blog que recomienda Mei: http://www.arturoyrosa.blogspot.com/

Esa familia está sufriendo, pero parece que lo están haciendo juntos. También puede salir cosas muy buenas de esa experiencia tan dolorosa - entonces quizás nos tenemos que preguntar una vez más: ¿Protegemos demasiado a nuestros hijos? ¿Y a nosotros mismos?

¿Qué sentido tiene la vida?

¿Vale la pena sufrir?

¿Vale la pena luchar incluso cuando no conseguimos lo que queremos?

¿Por qué adoptamos?

¿Por qué nos convertimos en padres?

Muchas preguntas...

Anónimo dijo...

Yo comprendo perfectamente que alguien rechace una asignación cuando piensa que no se siente capaz. Lo comprendo porque yo me hice dos amniocentésis. Lo comprendo perfectamente aunque me de pena.

Pero no comprendo el tenerla "olvidada". Comprendería que si tan hija la considera aunque no se sienta capaz de hacerse cargo, mantuviese contacto con el orfanato, le enviase cosas, preguntase por ella y se preocupase de cómo está.
Pero no es el caso... pasan anyos y después, cuando una pareja vuelve a ese mismo orfanato mueve cielo y tierra para ir a buscarla. ?después de no haber sabido nada de ella durante anyos?
Eso es lo que no comprendo.

Saludos
Eva DE

Anónimo dijo...

Y puestos a preguntarnos
?cómo se siente esa hija a la que abandonaron sus padres bio y su madre adoptiva?
?cómo se siente cuando ve que su madre adoptiva no se ocupa de ella para nada durante mucho tiempo y cuando se entera de que es una ninya sana la va a buscar?

es que no me parece normal.
Puestos a ser positivos, es mejor que esté con su madre a seguir en el orfanato! eso por supuesto.
Pero la reacción de esa mujer durante varios anyos...

Anónimo dijo...

Tremendo dilema. Pero yo estoy con las que no entienden la decisión de esta familia (porque aunque la madre viajara sola, lo que ya parece algo raro, la decisión sería de ambos??).

Creo que hay una diferencia importante entre la amniocentesis - y el aborto consiguiente si es el caso - y no aceptar una asignación. La diferencia es que en el primer caso, la criatura no llega a nacer, no llega a ser. En el segundo, dejas allí una criatura que está viva y que, sana o enferma, necesita una familia. Enferma, posiblemente la necesita todavía más.

¿Hay que pensar en los otros hijos que se tienen ya cuando se decide tirar o no adelante una adopción? Esta es una frase que oí bastantes veces cuando decidí adoptar a un segundo hijo con un problema (leve y subsanable) de salud. Pero, ¿y si es un hijo biológico el que nace con problemas (y no los hemos podido detectar en una amniocentesis)? ¿SE lo "devolvemos" al obstetra? ¿Le explicamos que no nos vemos capaces de tirarlo adelante, que le busquen una familia más valiente? ¿Le explicamos que "queremos ser padres y no hacer una obra de caridad", como he oído a algunos adoptantes al rechazar una asignación?

Me parece que hay algo en esta y otras historias de adopción que raya el considerar la criatura una mercancía. Cuando es defectuosa, no me la llevo (incluso sabiendo que esta decisión saca a la niña de los circuitos de adopción); cuando está en buen estado, entonces sí... y como dice EVA DE, sin preocuparse entre medio de cómo está, qué es de ella, etc.

No, no me parece bien.

¿Qué haría yo en esta situación? No lo sé. La verdad es que yo adopté a mi hijo mayor sin conocerle siquiera, tenía una foto y una analítica que descartaba VIH y hepatitis. Se convirtió en mi hijo antes de que pudiera verlo o llevarlo a un médico. En el caso del pequeño, el proceso fue algo distinto (fue "presencial"), pero también di el pistoletazo de salida de la adopción antes de conocerle. ¿Inconsciencia? Quizás sí. Quizás tengo una idea excesivamente simple de la maternidad.

http://madredemarte.wordpress.com/

Anónimo dijo...

haré varias reflexiones,especialmente para madredemarte
¿realmente una asignación o un conocer físicamente a un niño lo convierte en tu hijo? No,hay pocos casos en los que realmente el niño/a sea TU HIJO en ese momento, una cosa es llegar a la realización de ese deseo y otra es el sentimiento de unidad, de pertenencia, de amor incondicional...y lo mismo al contrario, ese hijo, ¿cuánto tarda en reconocernos como SUS PADRES? ese famoso vínculo no se hace en 1 minuto, ni en un día...
Lo mismo se puede decir en muchos embarazos y partos, por algo hay una expresión "depresión postparto", que básicamente es cuando la madre no siente el vínculo y el amor que a priori debería sentir.
El tema de la aminiocentesis y un posible aborto es otro tema, porque obviamente habrá personas que crean que un feto es ya un hijo, por lo tanto, estaríamos en las mismas.
Si un segundo hijo (o un primero, o tercero) nace con problemas no detectados en pruebas, se asume, al igual que en una adopción, cuando tu hijo se cae por las escaleras y no puede volver a andar, o cuando vas a una revisión y te dan la mala noticia de que tiene un tumor, o ...
Otra cosa es saber ya, de facto, que tu ese niño, biológico o adoptado, no va a vivir, que su esperanza de vida es corta, que va a sufrir.
¿qué madre está preparada para ver morir a su hijo? ¿qué madre tendría un hijo sabiendo que va a morir o que va a sufrir de forma sempiterna?
Hay personas especiales, de otra pasta, otro calado, son familias únicas, qué merecen toda nuestra admiración, al menos la mía, porque yo sé que no soy de ese calado, y lo reconozco.
Yo soy una de esas madres que rechazó no una, sino 2 asignaciones: primera parálisis cerebral que afectaba síquica y físicamente en niveles extremos, segunda, sindrome prune bally, en su grado más grave, afectando todos los órganos internos.
Mi hija también está enferma, pero es una enfermedad de la que no morirá, que le permite hacer una vida casi "normal".
¿es duro rechazar una asignación? DURÍSIMO, es duro tener una hija con una enfermedad crónica, también, pero nada comparable a saber que vas a perder un hijo desde el momento en que lo es.
Por último, es muy fácil desde la posición de padre/madre que tiene un hijo sano juzgar las actuaciones de los demás, incluso es fácil pensar que tú eres mejor, con mejores valores, que tú no actuarías así, pero tu/vuestros hijos son sanos, o enfermedades leves y curables.

Anónimo dijo...

Yo he dicho que no sé lo qué haría ante una asignación como las tuyas. Espero no saberlo nunca, por no encontrarme ante la tesitura.

Tampoco estoy preparada para algo así. Pero, ¿quién lo está? ¿Lo están los padres biológicos que tienen hijos enfermos - con enfermedades que no se han podido detectar - o discapacitados? NO, no lo están. Pero tiran para adelante.

Esta es la diferencia, y no es menor.

http://madredemarte.wordpress.com/

Anónimo dijo...

Creo que no has leído todo el post, mi hija está enferma, y tiramos para delante, pero no es lo mismo estar enferma que esperar su muerte.
Y si hubieran sabido de esa enfermedad ¿no es legítimo el aborto? la ley dice que sí, después están los valores personales de cada uno

Anónimo dijo...

EN EL CASO DE MERIDITH y conociendo los datos que cuentas, entiendo que dijera ese primer no. Doloroso y entendible desde mi punto de vista.
Pero la segunda parte de la historia me enfada y NO la admito.
No a querer saber ¿para que si se habia dado por hecho que era una enfermedad mortal?.
No a querer adoptar, por favor ¿no existen evaluaciones psiquicas en EE.UU?.
No a entrear a esa niña a esa madre.... ¿donde estan esos parapetos de burocracia china?.
Inconcebible. Inadmisible.
No los querria como padres (yo). En este caso la pregunta: ¿si me avandonaron una vez, lo pueden hacer otra? Tendria una sola respuesta: SI.

Anónimo dijo...

Yo no entiendo el rechazo de una adopción; en ningún caso. Pero es que yo tampoco abortaría; en ningún caso.

De todas formas, madredemarte, ¿cómo puedes decir que el aborto es menos malo que rechazar una asignación?. Pero si con el aborto no le dejas NINGUNA posibilidad de vivir. Al menos si rechazas la asignación le queda el Pasaje Verde. No decides el final de su vida, sólo te apartas de ella..... repasa tus palabras por favor. Duelen.