jueves, 12 de mayo de 2011

¿Cómo habría sido mi vida si...?



Quiero recomendaros un documental para ver con vuestros hijos.


He visto Bebés con mi hija (nacida en China) y nos ha encantado. Ella tiene 7 años, pero lo han visto las mayores de 12 y 15 y también les ha parecido interesante. Lo que no sé es si es igualmente interesante para chicos como para chicas, pero a edades tempranas, seguro que sí.

¿Cómo habría sido la vida de nuestros hijos adoptados en el extranjero si se hubieron quedado con sus madres biológicas? No lo sabemos, pero es interesante ver como los métodos de crianza son tan, tan distinto dependiendo del lugar del mundo en que te has nacido. ¿Parece obvio? Claro que sí, pero hay que verlo para creer hasta qué punto:

Namibia

Es lo más sorprendente para nosotros de occidente. Sería muy fácil pasar juicio sobre esta madre y sus amigas por no cuidar más la higiene de sus hijos - según nuestras normas. Pero lo que más me ha destacada ha sido su tranquilidad, dulzura y buen humor. ¡Qué bien se lo pasan todos juntos! ¿Dónde están los papás? No lo sé.



En algún momento, comenté a mis hijas: "Me pregunto ¿Cómo habría sido mi vida si me hubiera adoptado una madre de Namibia?" Todas estábamos de acuerdo con que hoy yo sería una madre muy diferente si me habían criado allí en un tribu sin electricidad, agua para los baños, microondas y ropa de Zara... Hmmm. Da mucho para pensar. Me parecen muy felices allí. Faltan los medios materiales que tengo yo, así que faltan algunas de las "soluciones" que tengo yo, pero también faltan un montón de los problemas que tengo yo...

Mongolia

Hay que ver como un bebé se puede criar entre tantos animales de granja, allí suelto, muchas veces sin supervisión - sin que le pase nada. Increíble.

¿Podemos observar una cosa así sin recurrir otra vez a los prejuicios interculturales? ¿Podemos aceptar que hay miles y miles de formas de criar a los hijos? ¿Que no pasa nada hacerlas cosas de otra manera?

Japón y EE.UU.

Estas dos madres para mí sólo servían de contraste. Me interesaba mucho ver como dependemos tanto del mundo material, de tantísimas cosas que otras madres en todo el mundo no parecen necesitar ni echar de menos. También me pareceió interesante nuestros niveles de higiene comparado con la de nuestras compañeras en otros países. Sí, sé que muchos niños en países "pobres" mueren por infecciones, contaminaciones, virus, fiebres, diarreas etc. Sin embargo, estoy cuestionando hasta qué punto tienen que intervenir muchos otros factores - como desnutrición, desastres naturales y plagas - para que eso sea el caso. Parece que hay un montón de niños en el mundo - de bebés recién nacidos - que tienen unas defensas hechas de hierro. Ahora entiendo porque algunos expertos están empezando a preocuparse tanto por los efectos de nuestra obsesión con la higiene, los productos de limpieza...


Estas son mis conclusiones personales después de ver Bebés:


Es bueno para todos los niños y - en mi opinión - para todos los adultos ver este documental. Es tan sencillo, sin diálogo, sin subtítulos, pero nos hace cuestionarlo todo.

Es bueno en especial para nuestros hijos adoptados de otros países porque muchas veces creo que sin querer elaboramos (con mucha ayuda de la sociedad, las noticias y más) una imagen negativa de la situación "allí" - donde la gente no es como nosotros - como si todos fueron pobres, quizás sucios, raros... Necesitan ver lo bonito que puede ser la vida en cualquier rincón del mundo, incluso cuando no sigue las estrictas reglas científicias de occidente.

Es bueno humanizar esas personas de lejos, ver que son exactamente como nosotros (sólo hay que notar como todos los bebés pasan por las mismas etapas de desarrollo), que aman a sus críos, que les cuidan a su manera y que la vida sigue adelante en todos los rincones del mundo, incluso sin carritos de marca, ropita de punto hecho por la abuela con muchos lazos, geles de baño, algodones, pomadas, pañales, parasoles, cremas solares, chupetes, biberones, papillas empaquetadas, leches en polvo...

Es bueno darnos cuenta de que hay vida - buena vida, vida real, vida digna, vida fascinante - más allá de nuestras fronteras :)


Es bueno considerar que si las condiciones de la familia de origen lo hubieron permitido, nuestros hijos podrían haber vivido perfectamente en sus países de origen.


Es bueno aprender de los demás. ¿No?

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece muy interesante, lo veremos!
El otro día mi hijo de 8 años, muy serio me hizo la siguiente afirmación:
Yo hubiése sido pobre.
Estuvimos un rato hablando sobre el tema, sobre como lo sentia, si le preocupava pensar en ello y en sus padres de allí, etc. Me dejó un poco descolocada, y quizás me equivoqué pero en aquel momento le dije que no deba pensar en que habria pasado si.... que las cosas son como son y que lo importante no es ser rico o pobre sinó ser feliz con lo que se tiene y estar contento con uno mismo.

Elena dijo...

Admiro a muchas familias de otros países que son felices con poco , muchas veces no es más rico el que más tiene sino el que menos necesita para ser más o menos feliz. Pero la verdad es que en lo que respecta a nuestros hijos, yo al menos, no me planteo qué hubiera pasado si se hubieran quedado en sus países, porque si se supone que se hubieran quedado con sus familias biológicas pues bien pero como el caso es que no fue así porque no se quedaron con ellas, pues la verdad es que no me lo planteo, quizá lo hubiera adoptado otra familia, no sé...Yo más bien lo pienso al contrario, qué hubiese sido de nosotros, sus padres, si no lo hubiéramos conocido y no hubiese llegado a convertirse en nuestro hijo. Y no me lo imagino, ni me puedo imaginar mi vida sin él, a pesar de todos los problemas y momentos duros que tiene este camino. Pero es nuestro hijo y eso es lo más importante del mundo.
Sí, nuestros hijos podrían haber vivido perfectamente en sus países de origen, siempre y cuando sus familias biológicas hubiesen querido o podido quedarse con ellos. Porque da igual el sitio, lo importante es tener una familia, por supuesto mejor en su país de origen pero si no, pues en otro. Pero si a lo que se refiere el artículo es que podrían haber vivido y sido felices con sus familias en sus países de origen a pesar de ser países pobres pues por supuesto que sí. Pero fueron abandonados, y eso lo cambia todo...

Mei dijo...

Qué interesante!!!Cuántas veces me hago yo esa pregunta sobre mis hijos???
Lo veremos...sin duda!!!Gracias, Brenda

Anónimo dijo...

Ya lo hemos visto. Sorprendentemente a mi hija de 5 anyos le ha encantado!!

Yo me he preguntado mil veces cómo sería su vida de haberse quedado allí. Ahora tengo muchas fotos y creo que tengo una idea aproximada de cómo podría haber sido...yo creo que como casi en todas partes, si haces lo que debes/tienes obligación, podría haber sido bastante feliz...

Gracias por la recomendación!
Eva DE

Laura dijo...

Creo que el documental tambien deberian verlo aquellos que piensan que a nuestros hijos les ha tocado la loteria por haberlos adoptado....
Curiosamente la pregunta de 'como crees que seria su vida si no le hubiesemos adoptado' me la hizo el otro día una chica en una entrevista, está realizando un trabajo en la universidad sobre adopción y me pidió ser entrevistada... le contesté que seguramente le habria adoptado otra familia, ya que yo partí de la base que mi hijo seria un niño adoptable en esa institucion... pero desde ese día que doy vueltas a la cabeza a este tema.
Laura.

Samaiaui dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con elena. Lo importante no es lo mucho o poco que tengan los hijos, si no lo felices que les hace su familia con lo que disponen.
Los niños abandonados necesitan una familia, es su derecho. Y si no es de su país pues se le debe buscar fuera.
saludos

Meri dijo...

Hola Brenda!
Soy Meri de decaminohaciti. Acabo de conocerte a través de otro blog y me encantará seguirte! Te enlazo a mi blog!
Nos vemos por aquí!
Un abrazo!

Silvia - Desenredando el hilo rojo dijo...

¡A mí tb me encantó el documental! Me hizo reír y me hizo reflexionar muchísimo. Fui al cine con dos niñas de 7 años; una se aburrió y a la otra le encantó y se rió mucho.
Yo al salir les pregunté: ¿Dónde creéis que son los niños más felices? Y ambas contestaron lo mismo: NAMIBIA. Curioso.
Besos